A orillas del embalse de Yesa se encuentran las ruinas de este antiguo balneario que, junto a otras decenas de pueblos, fueron abandonados debido a la construcción de dicho embalse.
Cuando el nivel del embalse es bajo, las ruinas del balneario salen a flote, pudiendo disfrutar de las aguas termales de este balneario en ruinas que ya existía en la época del Imperio Romano.