Volver a casa de algún concierto a las tantas de la mañana con tu peto y cambiarlo por los trajes regionales para ir a ver a la Virgen del Pilar y entregarle el ramo de flores es algo muy Zaragozano.
Las ofrendas a la virgen del pilar comienzan desde las 7 de la mañana hasta última hora de la tarde, pero si tienes que ponerte todas las capas que trae el traje ya puedes madrugar aunque salgas en el turno de las 11. Eso sí, todo pasa cuando entras en la Plaza del Pilar oyendo las Jotas y ves a la patrona vestida por miles de flores.