Nerea Esqués
La ventolera de Zaragoza es un distintivo de la ciudad y tiene nombre propio (y a veces vida) Cierzo, ese viento frío y seco que te cala hasta los huesos y alborota la ciudad.
Es un viento que se genera debido al cambio de presión entre el mar Cantábrico y el mar Mediterráneo. No es un fenómeno estacional y se puede presentar en cualquier época del año (Por suerte o por desgracia).
Este paisano ha dejado contenedores en mitad de la carretera, melenas alborotadas, paraguas del revés y árboles torcidos. Pero también gracias a él tenemos uno de los cielos más limpios de España y hace que Aragón sea una gran potencia en energía eólica.
Como curiosidad el 17 de Febrero de 1954 en Zaragoza registró rachas de hasta 135 km/hora siendo un récord y en 2017 rachas superiores a 96 km/hora.
Aunque a veces le odiemos porque casi no nos deja avanzar en un paso de cebra, o haciéndonos ver que no nos hemos peinado es uno más en la familia.
#1 Bienvenido Cierzo
#2 Acostumbrarse al cierzo ¿Sí o No?
#3 Cierzo el travieso
#4 Cierzofobia, nueva definición en el diccionario
#5 El moonwalker algunos lo hacen con más estilo que otros
#6 ¡Volando voy, volando vengo!
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